Designación usada por Rolex para la catalogación de sus relojes certificados. El concepto de Cronómetro Superlativo comenzó a usarse en 1950 y fue redefinido en 2016 según los criterios actuales. Su objetivo es cubrir aquellos requisitos que quedaban fuera del Contrôle Officiel Suisse des Chronomètres (COSC), que superan todos los movimientos fabricados por Rolex. La prueba para obtener el grado de Cronómetro Superlativo se realiza con el reloj terminado, una vez que su movimiento ha superado el test oficial COSC y ya ha sido montado en su interior. La certificación Cronómetro Superlativo engloba tanto la hermeticidad del reloj, que protege el movimiento del agua, como la totalidad de los elementos exteriores que comprometerían su precisión, así como la cuerda automática y la autonomía del movimiento, todo ello garantía de un reloj que continúa funcionando con precisión con el paso del tiempo. Una diferencia muy importante respecto al COSC tradicional es la exactitud requerida a los relojes terminados, cuya desviación debe estar comprendida dentro del rango de -2/+2 segundos al día cuando tienen la certificación de Cronómetro Superlativo.
Esfera de Rolex Daytona con leyenda Cronómetro Superlativo