RELOJ DE PARED

Los primeros relojes mecánicos de pared deben haber aparecido en Inglaterra, Alemania e Italia, y eran miniaturas burdas de los relojes de torre (hechos de hierro, o totalmente de madera, estaban en jaulas y tenían un sistema de campanilla en la parte superior). Posteriormente, los relojes de pared siguieron casi siempre el modelo de los relojes de caja alta, e incluso, se les denominaba de “media caja”.